lunes, 19 de mayo de 2008

Estadio Sensorio motriz según H. Wallon (Resumen)


Organización y estructuración de las relaciones.
Sincretismo indiferenciado y diferenciado.

LA NECESIDAD DE ORGANIZACIÓN Y ESTRUCTURACIÓN DE LAS RELACIONES CON LOS OTROS Y CON LOS OBJETOS

WALLON, en "Los orígenes del carácter en el niño" desarrolla aspectos que hacen a la necesidad de organización y estructuración de las relaciones con los otros y con los objetos, que ha dado en llamar SOCIABILIDAD SINCRÉTICA:
Describe como un período de SOCIABILIDAD muy acentuado a aquel que se extiende del 7° al 12° mes, en el que los movimientos dirigidos hacia el otro son 4 veces más frecuentes que en el 1° semestre y sobrepasan en un tercio la frecuencia que tendrán en el segundo año.

En este período el miedo frente a los extraños desaparece, permitiendo al niño entrar en relaciones con cualquier persona. Por el contrario frente a las cosas prepondera la actitud contemplativa que no supera hasta los 12 meses.
Los GESTOS de PREHENSIÓN, multiplicándose, contribuyen a la efusión continua del niño sobre el otro. Y se diferencian en gestos amistosos y en gestos de competición, bajo influencias psíquicas que traducen relaciones de protección o de rivalidad.
En esta edad, la SENSIBILIDAD SOCIAL del niño es un hecho esencial .
Y si durante los primeros meses podía parecer implicada por sus necesidades orgánicas. Durante el segundo semestre se separa como algo específico. Provista de medios variados para expresarse, precede las relaciones sensorio-motoras con los objetos. Sus manifestaciones son en un primer momento determinadas por la situación.
Al examinar distintos aspectos se muestra mejor su naturaleza: Bühler, estudio las ACTITUDES RECIPROCAS de los niños. Concluyendo que la primera condición para que se establezcan es que haya un mínimo de acuerdo entre sus maneras de reaccionar. Dos actividades complementarias no pueden realizar una totalidad psicodinámica si son demasiado heterogéneas. No pueden encadenarse entre sí por estimulaciones recíprocas, sin cierta concordancia de interés, expresión, ritmos y gestos.
La diferencia de las edades puede ser compensada cuando el niño llega a ser capaz de conquistar su personalidad, hacia el tercer año.
En los límites de la edad en que las reacciones recíprocas pueden producirse, éstas obedecen a condiciones muy determinadas:


Antes del 6° mes, el período de acomodación sensorial no dio lugar al de prehensión, el niño juega el papel de ESPECTADOR. Si toca a otro, parece no darse cuenta; pero un gesto recíproco puede ayudarlo a tomar conciencia.

Pueden producirse GESTOS de PROXIMIDAD y de INTERCAMBIO. Así la contemplación pide exteriorizarse, transformándose más en comunión y participación.

La actitud complementaria consiste en EXHIBIRSE, lo hacen los mayores. Ambos niños están cautivados por la situación nacida de su recíproca vecindad. Están confundidos entre sí: el que exhibe está como excitado por la expectación del otro.

Con niños mayores, la situación suscita gestos en los dos: el acto en relación con la situación de contacto entre los dos niños se AUTONOMIZA. La individuación del gesto suscitado por una situación precede a la de los partenaires.

Un poco más tarde, son éstos los que parecen individualizarse, o sus puntos de vista

La OPOSICIÓN puede traducirce en despotismo o rivalidad Según Bühler, la RIVALIDAD no se manifiesta entre niños cuya diferencia de edad sobrepasa los dos meses y medio por año. Puede ser competición en el juego. A menudo es directa y repentina. Los dos niños buscan dominarse, sea por juego o por animosidad.

El DESPOTISMO es el sentimiento de superioridad buscando ejercerse bajo su forma pura. Esta necesidad de dominación se funda en la confusión inicial de sí y del otro en una misma situación sentimental. El despotismo no implica necesariamente malos tratos u hostilidad, sólo exige señales de asentimiento o de admiración. El despotismo depende de su contrapartida, la SUMISIÓN, el partenaire soporta todo, se deja desposeer y golpear sin reaccionar.
ESTADIO SENSORIO MOTRIZ SEGÚN H. WALLON

A SINCRETISMO INDIFERENCIADO Y DIFERENCIADO
El estado de combinación con el otro que expresa una situación afectiva da cuenta de manifestaciones de apariencia compleja y precoz, como los CELOS y la SIMPATÍA.

A. I. Celos
Estas no implican la noción previa de personalidades muy distintas de la suya. Al producirse hay REGRESIÓN hacia un ESTADO de relativa INDIFERENCIACION. Se explican partiendo de la pareja CONTEMPLACION-EXHIBICION:
Pero, en este caso ha habido un progreso, los dos polos de la situación, se integran en el mismo individuo. A la contemplación se agrega el sentimiento o la necesidad de ser aquel que actúa o que exhibe CELOS; participación que anuncia el momento de la individuación.
Atraído por los dos polos, la aproximación a cada uno, hace resaltar la oposición en su propia sensibilidad, está muy cerca de sentir la necesidad de concentrarse sobre uno de ellos, y de cristalizar alrededor del otro un personaje diferente de él.
El mecanismo de esta etapa marca la transición entre una total sujeción a las relaciones afectivas y la discriminación de las personas.

En el niño, las primeras reacciones de CELOS se observanhabitúalmente a los 9 meses: el niño grita, llora, se agita, cuando ve que una persona mayor se aproxima a otro niño, lo alza, le da de mamar. Eventualmente puede estar celoso de un objeto.
Los celos adquieren formas y motivos que responden a los progresos de la edad. Paulatinamente, en el conflicto entre la contemplación y el deseo de acción, es la acción la que va a ser decididamente inhibida, rechazada, dando lugar a la ANGUSTIA. Refugiándose en su actitud de espectador, el auténtico celoso se nutre de escenas mortificantes con una áspera avidez. Su propia existencia resulta invalida, asolada, por los éxitos del otro; no puede apartar de él su imagen; y se siente desposeído de aquello que esa imagen le muestra como de una parte esencial de sí mismo.
Puede ocurrir que de una contemplación, de una mascullación largo tiempo contenida, explote un gesto para castigar al rival. Pero, es más frecuente, que los celos permanezcan fieles a sí mismos. Entonces, el celoso, no ve otra salida a su angustia que aniquilar aquello que siente debe ser suyo, sin poder o sin querer apropiárselo efectivamente, después de aniquilarse él mismo. Complaciente con su angustia, puede alimentarla con torturas infligidas a ese doble de sí que pone en el objeto deseado.
Los CELOS son esencialmente una vuelta hacia el estadio en que aquel que participa de una situación afectiva, siente las actitudes complementarias. Sin poder aislar la que le es propia, se deja dominar por la que lo despoja y experimenta una ANSIEDAD de la que se hace más o menos cómplice. Es el sentimiento de una RIVALIDAD en aquel que no puede reaccionar más que como espectador poseído por la acción del rival. Es una SIMPATÍA sufriente y pasiva.
A. II. Simpatía

Su campo de manifestación es vasto, hay que distinguirla del MIMETISMO AFECTIVO del cual procede y, del ALTRUISMO que en parte procede de ella.
El sujeto ya no sufre el contagio de las emociones que se expresan a su alrededor. No reacciona siempre de manera similar, sino también de manera complementaria. Participa simultáneamente de dos situaciones, sin poder todavía disociar los dos puntos de vista. Por eso se distingue del ALTRUISMO, pues en este la existencia o la personalidad del otro llegan a ser una razón para actuar y, a veces, para satisfacerse a sí mismo con
plena conciencia del sacrificio. El altruismo implica una individualización de sí y del otro que permite discernir, confrontar, combinar los intereses respectivos.
Para simpatizar, es necesario haber pasado por experiencias subjetivas, reconocer los signos de éstas en otros y ponerse al unísono con ellos, reviviendo sus propias impresiones
A. III. Mimetismo afectivo y sociabilidad
A partir del 2° mes el lactante comienza a responder con gritos a los gritos del lactante vecino, con sonrisas a la sonrisa de su madre, recuerda las asociaciones condicionadas que se han hecho bajo la influencia de las necesidades interoceptivas, por ej., las que se establecieron entre el acto de mamar y la voz humana.


Es necesaria también, cierta consonancia de edad entre los dos niños para que el efecto se realice. Además es inevitable agregar, entre los hechos causales, el carácter contagioso de las manifestaciones afectivas, que se observan con una gran precocidad en el niño.

Manifestaciones organizadas con centros especializados en el sistema nervioso y que responden a una función. Función que no tiene interés para las relaciones del individuo con el mundo físico; muy por el contrario, con frecuencia tiende a comprometerlas. ¿Cómo el canto del pájaro, por una parte, el lenguaje articulado, por otra, no implicarían la existencia de partenaires eventuales?. Situada entre dos tendría por efecto suscitar las reacciones del otro. Perteneciendo aún a los hábitos del individuo, pero también a maneras de ser que varían según las circunstancias y las disposiciones íntimas, permanece demasiado mezclada con estas disposiciones, para prestarse, como el lenguaje, a una utilización independiente.
Así, no apta para modificarse sin que se modifique simultáneamente el comportamiento del sujeto, no apta para expresar realidades exteriores, ¿qué otro efecto puede tener que provocar manifestaciones análogas en el otro?. Incapaz de proponer objetos variados a la actividad del otro, como hace la palabra, se limitaría a asegurar la unión de las reacciones y de las impulsiones entre los miembros del grupo. Esta necesidad elemental la habría hecho desarrollarse y desarrollar sus medios de expresión.


A. IV. Plasticidad postural y formulación mental
Las manifestaciones de la MÍMICA pueden extraer del exterior ciertos complementos, pueden desarrollar acciones dramáticas y escenas figuradas; sus fines y sus objetos están en ellas mismas. Implican una representación todavía confundida con su objeto, y su objeto es el sujeto, que percibe en ella sus disposiciones y que percibe por su intermedio a los otros en sí mismo y a si mismo en los otros.

Más que una representación es una FORMULACIÓN que responde a una situación determinada.
FORMULACIÓN que consiste en actitudes apropiadas y se resuelve en los estados diferenciados de tensión de los que están hechas estas actitudes. Se libera por GESTOS PLÁSTICOS, por ritmos, por contorsiones o por espasmos. Proceden inmediatamente de las FUNCIONES POSTURALES ejerciéndose por sí mismas.
La MÍMICA no es sino la FUNCIÓN POSTURAL apropiada a las necesidades de la expresión, a las necesidades de las relaciones afectivas entre los individuos.
La FUNCIÓN POSTURAL es una función de ACOMODACIÓN.
Acomoda el organismo a las reacciones que las circunstancias ordenan; los órganos sensoriales a los objetos que percibe





1 comentario:

Anónimo dijo...

has leido la evolución psicológica del niño? tiene algo que ver con este resumen?