martes, 20 de mayo de 2008

Fase Anal: caracterización según S. Freud (Resumen)


La descripción de la evolución funcional del niño replantea desde un punto de vista dinámico y estructural, las nociones clásicas de la LIBIDO y el YO
.
Desde una PERSPECTIVA PSICOANALITICA, la formación de las RELACIONES OBJÉTALES puede ser abordada en función de las NECESIDADES LIBIDINALES; mientras que el ASPECTO COGNITIVO y PERCEPTIVO del proceso pueden ser abordados en función del YO.
El psicoanálisis ha estado influido por los movimientos evolucionistas. Freud consideraba muy importantes los aspectos filogenéticos y la evolución temporal del sistema psíquico, fundamentalmente la libido. Aún cuando en sus primeros trabajos confirió primacía a lo genital, posteriormente introdujointrodujo los estadios pregenitales (oral, anal, fálico).
Entre el ESTADIO ORAL y el ANAL hay un desplazamiento de ZONAS EROGENAS, pero tanto en uno como en otro, la sexualidad infantil continua desarrollándose: primero en la función alimenticia y el segundo en la función de evacuación, condicionando la evolución de la libido la evolución psíquica.
Al período de desarrollo abordado en esta Unidad, corresponde la FASE ANAL (1 a 3 años):
Se caracteriza por una organización de la libido unida a la evacuación y excitación de la mucosa anal. Los primeros impulsos anales son AUTOEROTICOS, pero el placer que supone el eliminar, como posteriormente, la retención, adquieren significado estrechamente relacionado con la función defecatoria, la expulsión-retención, y el valor simbólico de las heces.
El interés del niño gira primordialmente alrededor de la mucosa anal, o más exactamente, del dominio de los esfínteres.
La ZONA ERÓGENA dominante es la ANAL, que comprende los órganos de la evacuación fecal, los urinarios, Y las nalgas. Se pueden distinguir 2 períodos:
1. Uno PASIVO, en el cual el niño está interesado en el paso de sus extrecrementos.
2. Otro ACTIVO, en el cual el niño parece sentir cierto placer tanto cuando expulsa sus excrementos como cuando los retiene.
Desde el punto de vista afectivo, podemos decir que el ESTADIO ANAL es extremadamente AMBIVALENTE, entendiendo por ambivalencia la presencia simultánea de tendencias, actitudes y sentimientos opuestos (especialmente amor y odio) en relación con un mismo objeto.

De allí, que el niño necesita en todo momento el objeto que le agrada, reclama la persona cuando no está presente (tal vez porque es incapaz de tener un esquema mental de esa persona) quiere absorverla y destruirla sí no hace lo que él quiere.
La ambivalencia de su comportamiento se manifiesta por la alternancia amor-odio, sadismo-masoquismo.
La ambivalencia del amor y de la agresividad resultan de la doble naturaleza que presentan las materias fecales, ya sean como objetos a rechazar o a conservar, excrementos que pertenecen al niño.

El SADISMO que se ha ido iniciando en la fase tardía del estadio oral está asociado a la ANALIDAD; según Laplanche, esto es debido al sentido destructivo de la eliminación y al hecho de que el aprendizaje del control de los esfínteres se convierte en un instrumento de oposición a los adultos


Por el contrario, el masoquismo va a resultar de la excitación que provocan las nalgas

Abraham distingue dos periodos en esta fase:
En el primero, el erotismo anal se manifiesta en la evacuación y el impulso sádico en la destrucción del objeto.
En el segundo, el erotismo anal va unido a la retencion y el impulso sadico al control de su posesión
El Yo, definitivamente formado, comienza a afianzarse frente al mundo estableciendo activamente relaciones diferenciadas y siendo capaz de retrasar o no, la satisfacción de las pulsiones.
Como intermediario entre el estímulo y el mundo, el Yo aprende a resolver los conflictos entre las exigencias pulsionales y las prohibiciones sociales, y a evitar las impresiones penosas.
Bajo e! efecto de ser castigado, el niño comenzará a interiorizar ciertas prohibiciones parentales, imaginándose los preludios del Super-Yo, que todavía no está diferenciado del Yo.
los mecanismos defensivos del Yo son: introyección, proyección y negación, transformándose la negación en actos, una negación en palabras.



1 comentario:

Anónimo dijo...

Excelente descripcion de dicha fase. Durante todos los años d la carrera no encontre nada igual. Gracias!